Los campilleros desde la creación de esta localidad en 1492 se
dedicaron principalmente a la agricultura y la ganadería. Pero a partir de 1830
la población crece desde 1236 vecinos hasta llegar a 5745 vecinos en 1860.
De la importancia industrial y artesana mantenida en la localidad de Campillos. (Página 98 de la Pequeña Historia de Campillos, Baltasar Peña Hinojosa, 1960)
Este
crecimiento de población viene en paralelo a una implantación de la industria y
la artesanía en nuestra localidad. En 1830 en Campillos había veinte fábricas de
telares de paño, una de tundir y prensar, cuatro de lencería, una tenería (curtido de piel), cuarenta de pieles de estezado y otros colores, cuatro de tejas y ladrillos, una de sombreros, ocho carpinteros de basto, doce de pino y talla, diez maestros alarifes (maestro de obra), dieciséis zapatearías, cuatro herrerías, tres de cerrajería, dieciocho barberías, dos tintorerías, dos sastres, cuatro fábricas de cal, diez de yeso, cuatro de picapedreros, cuatro tiendas de lencería, tejidos de seda y demás
surtido, una calderería, 22 a abacería (Establecimiento de venta al por menor de aceite, vinagre, legumbres secas, etc.:), dos administraciones de licor, catorce puestos públicos de bebida, una confitería, dos boticas, dos albeítares (veterinario no titulado), dos
billares, un juego de bolos y 6 horno de pan cocer.
Esto da un idea del espíritu emprendedor de la población de Campillos, que se verá refrendada con un gran número de nuevos proyectos iniciados en los años 60 del siglo XX.
Comentarios
Publicar un comentario